- Buenos días con permiso, Señor Alcalde!
- Qué más hermano? Cómo estás hombre?
- Bien y a usted como le ha ido?
- Como te ha ido pues?
- Bien bien gracias a Dios, mucho gusto, Eduardo Cristian.
- Eh, que más hermano, cómo es el nombre tuyo?
- Eduardo Cristian.
- Que más hombre Eduardo, bien o no?
- Bien por acá a molestarlo señor Alcalde.
- Qué le pasó hermano que le veo cara de angustia hombre?
- Agsh es que yo estoy todo enamorado.
- ¿Cómo? pero no de mi pues...
- No no no Señor Alcade no... de una chica... con la que ud presenta su programa, Aurora Vanesa.
- ¿De Vanesa?
- Si Señor Alcade es que
- ¿Cómo se llama ella?
- Aurora Vanesa.
- Y ella nunca me había contado el primer nombre.
- ¿No?
- ¿Es en serio?
- En serio Señor Alcade.
- Voy a hablar con ella. ¿Qué hay que hacer?
- Yo siento cosas muy bonitas por ella.
- No te lo puedo creer.
- Y ella no me quiere parar bolas.
- ¿Y por qué? ¿Pero ya le dijiste o no?
- Pues yo he hecho el intento, he hecho algunas cosas, pero ella no, no está convencida de mi :(.
- Pues hermano, esa mona es muy pinchada. Déjeme yo hablo con ella hermano a ver que puedo hacer, pero deciselo no?. ¿Ya te le arrodiyaste o no?
- No, me falta eso.
- ¿Y le llevaste flores?
- Sí, eso sí señor.
- ¿Y nada?
- Y nada (inaudible)
- Entonces la cosa no va bien. Yo creo queee.. dejame yo hablo con ella y vamos a ver que hacemos. Si no que ella es muy famosa, vamos a ver si para bolas, listo?
- ¿Y a dónde me puedo remitir también?
- No, vos me llamás. Ahorita de doy de una vez mi correo y todo, y yo me voy con ella en programa. Yo todos los jueves hago un programa con ella a las 8 de la noche, y en directo. Y si yo puedo ahí en vivo le hago la cuñita, ¿Listo?
- Listo.
- Y si usted puede llamar -porque ahí se llama en directo-, usted también puede llamar y declararle su amor, ¿Listo?
- Ah, ¿Usted me haría ese favor? ¿No le molestaría?
- Per de una! No, ojalá ella no se ponga brava.